LOS VECINOS Y VECINAS PUEDEN FRACCIONAR O APLAZAR EL PAGO DE LOS RECIBOS MUNICIPALES
El concejal de Hacienda, Miguel Mahía, quiso recordar la posibilidad que tienen los vecinos y vecinas de fraccionar y aplazar el pago de los recibos municipales si así lo desean, así como aclarar las causas del retraso en la emisión de algunos recibos hasta este mes.
En primer lugar, desde la concejalía de Hacienda recuerdan a los vecinos y vecinas que durante el período voluntario de pago de las tasas de basura, agua, alcantarillas saneamiento, canon del agua y coeficiente de vertido del primero y segundo trimestre de 2020, los vecinos y vecinas no tienen por qué realizar el pago de los dos recibos conjuntamente. Hasta el 30 de enero de 2021 las personas que no tengan domiciliados los recibos podrán pagarlos conjuntamente o de manera separada si así lo prefieren “Los vecinos han recibido en sus casas los dos recibos a la vez, pero pueden pagarlos juntos o separados hasta el 30 de enero. Si están domiciliados, se les pasará uno en diciembre y otro en enero”.
El fraccionamiento podrá realizarse hasta 12 meses (excepcionalmente ampliables), y los vecinos y vecinas interesados deberán hacer la solicitud por registro (presencial o sede electrónica) con una instancia tipo, señalando los recibos que deseen fraccionarse, el importe de los mismos y el plazo en el que se desee hacer frente a la deuda. Una vez recibida la solicitud, la Concejalía de Hacienda procederá a resolverla, informará a la recaudación municipal, y la persona solicitante del fraccionamiento recibirá una copia de la resolución en su domicilio donde se le señalará el importe mensual al que deberá hacer frente, los meses y las formas de pago.
El aplazamiento de los recibos municipales podrá realizarse también hasta un máximo de 12 meses (excepcionalmente ampliables), y los vecinos y vecinas interesados deberán hacer la solicitud por registro (presencial o a través de la sede electrónica) con una instancia tipo, señalando los recibos que deseen aplazar, el importe de los mismos y el momento en el que deseen realizar el pago de las deudas. Una vez recibida la solicitud, la Concejalía de Hacienda procederá a su resolución, se informará a la recaudación municipal y el solicitante del aplazamiento recibirá en su domicilio una comunicación donde se le señalará el importe del aplazamiento y la fecha en la que deberá efectuar el pago, así como diversos canales existentes para realizarlo.
La diferencia entre fraccionamiento y aplazamiento es que en el fraccionamiento se decide en cuantas mensualidades quieren fraccionarse los recibos, y en el aplazamiento se decide retrasar el importe total de uno o más recibos hasta una fecha determinada (la que indique el vecino).
Desde la concejalía se recuerda que en ningún caso puede fraccionarse o aplazarse la parte del recibo que recoge el canon y el coeficiente de vertido ya que se trata de un concepto que no está regulado por normativa municipal, sino de la Xunta de Galicia.
El motivo de fijar en un máximo de 12 meses los fraccionamientos y aplazamientos de los recibos fue no dilatar más allá de un ejercicio económico el pago de los mismos. Miguel Mahía quiso aclarar que de manera excepcional y justificada por parte del solicitante, “los plazos se podrán ampliar el tiempo que el solicitante requiera”.
Por otra parte, el concejal ante la confusión y el malestar que está causando en algunos vecinos, quiso recordar que fueron varios los motivos por los que no se cobraron los recibos hasta ahora, con la apertura del plazo voluntario de 23 de noviembre a 30 de enero para el pago de las tasas de basura, agua, alcantarillas saneamiento, canon del agua y coeficiente de vertido del primero y segundo trimestre de 2020.
“El primer motivo fue que en el mes de marzo, con el estado de alarma decretado, las actividades municipales se limitaron al máximo, por lo que no se realizaron todas las lecturas de los contadores por parte del personal”. Asimismo, el concejal recordó que “los plazos administrativos se suspendieron en todas las administraciones hasta el mes de junio, lo que impedía de facto la aprobación de los padrones cobratorios que tienen que exponerse 3 semanas al público, por lo que en todo caso se habría retrasado mínimo hasta el mes de agosto el cobro del primer trimestre” subrayó el concejal.
Llegado el momento de la normalización de la gestión administrativa municipal en los meses de julio y agosto, los retrasos en la aprobación y en el cobro de las ayudas a los colectivos más vulnerables (principalmente Ingreso Mínimo Vital y ERTEs) que se estuvieron produciendo, llevaron a pensar a los miembros del gobierno municipal que retrasar el cobro de las tasas municipales el máximo tiempo posible sería la opción que más beneficiaría a las familias con problemas para afrontar estos pagos.
Mahía confirmó que “Lo que hicimos fue retrasar al máximo el cobro dentro de este año, y ampliar hasta los dos meses y medio el período de pago, manteniendo la posibilidad de adaptar los pagos como cada vecino o vecina prefiriera. Sacamos los recibos del primer y segundo trimestre al cobro conjuntamente, y son los vecinos los que deciden se pagarlos juntos, separados, fraccionarlos o aplazarlos. Esta fue la mejor manera de gestionar los recibos que pudimos articular, y está pensado para que aquellas familias con mayores dificultades económicas puedan adaptar el máximo posible la forma de hacer frente a los pagos”.
Mahía quiso desmentir que el ayuntamiento hubiera podido cancelar el pago de las tasas para todos los vecinos o que se hubiera podido fijar un mínimo mensual idéntico para todos los recibos “Hay cosas que se están diciendo que no son legales ni viables. Entendemos el malestar de algunas personas, pero existen herramientas para ayudar a aquellos que no pueden hacer frente a los recibos, y todas esas herramientas ya están la disposición de los vecinos y vecinas. Hay que dar facilidades a los que lo necesiten, pero esos no son todos los vecinos. Muchas familias tienen una situación económica que les permite hacer frente a los recibos de la manera habitual y no tienen por qué no pagar, o pagar un mínimo. Para los que no pueden afrontar los pagos en los plazos fijados, existe el fraccionamiento, el aplazamiento, las ayudas sociales, las exenciones, y toda una batería de resortes de los que dispone la administración en los que trabajamos para no dejar a nadie atrás”.
“Desde el gobierno estamos viendo algunos discursos demagógicos que intentan aprovechar el malestar justificado de algunos vecinos, para atacar al gobierno municipal. No hacemos todas las cosas bien y estamos abiertos a las críticas, pero esperamos mayor responsabilidad de quienes conocen el funcionamiento de la administración y el trabajo que se está haciendo para ayudar a los que realmente lo necesitan” afirmó el concejal.
Para finalizar, el concejal quiso aclarar cómo se realizaron los cálculos en los consumos de los recibos. “En marzo, cuando salta el estado de alarma, nos encontramos con que no están recogidas aún todas las mediciones de los contadores de agua del primer trimestre. Llegado el mes de julio, cuando se realizan las mediciones del segundo trimestre, y se da inicio a la confección de los padrones cobratorios decidimos que, en los casos donde no hubiera existido lectura del primer trimestre, se repartiría el consumo entre los dos recibos, para que ninguno de ellos fuera especialmente alto. Pensamos que era preferible pasarle a una vecina dos recibos de 70 euros, que uno de 30 euros y otro de 110 euros. Nuevamente, la decisión se tomó pensando en las personas que pudieran tener mayor dificultad para hacer frente al pago” finalizó Mahía.
En el siguiente enlace puede descargarse la instancia para realizar la solicitud de fraccionamiento o aplazamiento:
DESCARGAR PDF Solicitud de fraccionamiento o aplazamiento de recibos